17 marzo 2009

Inventario...


Me gustan las moras de chuche, la salsa de la ensalada china, las pinturas de Gauguin, que me abracen por detrás, escuchar a alguien cantando en la ducha, las pelis de psicópatas que te persiguen, que me sonrían, el vino dulce, ir a ver una exposición y aprender cosas, hacer figuritas de comecocos con los billetes de autobús,…los mimos, las margaritas y las mariquitas, ver fotos, los bebés que se ríen a la mínima, las uvas peladas y sin hueso, que me dibujen la cara con el dedo, dibujarla yo y pasarlo una y mil veces por las cejas y los párpados para fastidiar sin dejar abrirlos, un concierto en directo escuchando mil voces cantando lo mismo, el calvo de la lotería y su música del “Dr. Zhivago”, los libros infantiles, salir a tomar un café a las cuatro de la tarde y volver a las cinco de la mañana, los dibujitos que adornan los cuadros de Klimt, las manos, los preparativos cuando voy a hacer algo que me gusta, un buen homenaje,… Por principio me gusta la gente que cuenta cosas interesantes, ir a la playa en invierno, dormir hecha una croqueta con la colcha, hacer toneladas de espuma, gritar los goles del barcelona y picar a los merengues, Rebecca Dautremer, las personas que se parten de risa antes de terminar de contar un chiste, las que tienen la habilidad de sorprenderme, las familias numerosas y requeteunidas, coger la primera aceituna nada más abrir el bote o el último cuadrito de queso para la ensalada, las preguntas que me dejan pensando, preguntar por todo… Cuando encuentras algo y tienes la sensación de que es lo que buscabas, las preguntas de Mafalda y las historias de Calvin y Hobbes, la gente que es condenadamente feliz solo con lo imprescindible, una piscina de noche…, “Elling”, bailar los ‘caracoles’ del tío calambres en plan ‘rigui’, los pañuelos grandes para el cuello, las pulseritas de colores, entrar en una papelería y quererlo todo, los reencuentros, el meneo de un pingüino al andar, las buenas contradicciones, ganar a las cartas, las chanclas hippies, la frase ‘quiero hacer contigo lo que la primavera hace con los cerezos’, los globos inflados con helio, las estrellas del techo de la habitación, cuando te llega un mensaje un minuto después de haberte despedido de esa persona para decirte que lo pasó genial… Las gracias a quien corresponda, por cada una de estas cosas. Sin ellas no sé si moriría, pero vivir no sería lo mismo, definitivamente... Y ahora bien, retomamos el asunto? :)